Durante décadas, el ideal del liderazgo estuvo asociado al control, la autoridad y la toma de decisiones centralizada. El jefe sabía, ordenaba, supervisaba. Su rol era “hacer que las cosas se hagan”. Pero hoy, ese modelo muestra sus límites. Las redes de trabajo son más horizontales, los problemas más complejos y los equipos más diversos. Lo que se necesita ya no es tanto un jefe como un facilitador.

¿QUÉ HACE UN JEFE FACILITADOR?

Un jefe facilitador no impone, sino que habilita. No se posiciona por encima, sino en el centro de la red, conectando personas, sentidos y decisiones. Facilitar implica:

• Generar condiciones para que otros puedan aportar, decidir y aprender.
• Hacer visibles los bloqueos y acompañar a destrabarlos.
• Escuchar de verdad, incluso cuando lo que aparece incomoda.
• Cuidar los vínculos, sin evitar el conflicto.
• Sostener conversaciones difíciles, con apertura y firmeza.

No es un liderazgo pasivo. Es activo, intencional, pero desde otro lugar. Facilitar no es “no hacer nada”. Es intervenir con criterio, habilitar con humildad y sostener con coherencia.

¿POR QUÉ ES CLAVE EN LAS ORGANIZACIONES EN RED?

Porque el contexto actual exige otra forma de liderar. Ya no alcanza con decidir rápido: hay que decidir bien y eso requiere múltiples miradas. Ya no basta con controlar tareas: hay que integrar saberes distribuidos y adaptarse sobre la marcha.

Las organizaciones que funcionan como redes vivas —más que como estructuras rígidas— necesitan liderazgos que conecten, no que concentren. Y eso requiere una mentalidad distinta: una que valore el proceso tanto como el resultado. Este liderazgo no se improvisa. Se practica. Se construye. Se entrena.

LIDERAR DESDE EL CENTRO

Transitar de jefe a facilitador no es solo un cambio de estilo: es un cambio de paradigma. Implica soltar la necesidad de control absoluto, revisar las propias creencias sobre la autoridad y animarse a liderar desde la conversación, la escucha y el vínculo. También implica aprender a leer el sistema, entender en qué momento está cada equipo y sostener procesos que no siempre dan certezas, pero sí ofrecen dirección y sentido.

En Compass trabajamos con líderes que eligen facilitar en lugar de imponer. Acompañamos ese recorrido con herramientas concretas, espacios de conversación profunda y marcos conceptuales que fortalecen su capacidad de leer, intervenir y sostener procesos de transformación cultural.

Porque cambiar la forma de liderar es también cambiar la forma de habitar una organización. Y cuando cambia la cultura, todo se vuelve posible.

¿Querés trabajar este cambio en tus equipos de liderazgo? Escribinos a contacto@compassuy.org

_{Crédito de la imagen destacada: foto de Jeffry S.S.: https://www.pexels.com/es-es/foto/persona-trabajando-agricultura-granja-8791498/}